Exámenes aprobados al hijo y firmas adulteradas: cómo era conseguir licencias de conducir en Coronel

Exámenes aprobados al hijo y firmas adulteradas: cómo era conseguir licencias de conducir en Coronel

El informe final de Contraloría determinó que la lista de irregularidades de la Dirección de Tránsito de Coronel es más larga de lo esperado. Desde firmas falsificadas de médicos hasta funcionarios que las vendían aparte. Si bien ya habían sido notificados en 2020 de lo anómalo que resultaba todo, surgieron nuevos casos que demuestran que el desorden en la entrega de licencias de conducir persisten. Ahora, todos los antecedentes fueron remitidos al Ministerio Público.

Certificados de enseñanza media falsificados, exámenes médicos adulterados y hasta pagos a una funcionaria municipal son algunas de las irregularidades que revelan el paupérrimo funcionamiento de la Dirección de Tránsito de Coronel.

Pese a que la institución ya estaba bajo la mira y fue advertida previamente, Contraloría detectó en su informe final —y al que accedió BBCL Investiga— nuevos casos que exponen que las malas prácticas persisten. Si bien el archivo figura con fecha 2 de febrero de 2024, recién esta semana fue liberado.

Las anomalías llegan a tal punto que la entidad fiscalizadora determinó que entregaron licencias de conducir a personas con antecedentes penales. Lo que por ley está prohibido para ciertos delitos. También que adulteraron pruebas teóricas o manipularon firmas del gabinete psicotécnico.

A la lista se suma que un funcionario de la dirección le aprobó la licencia a su hijo que incluía una profesional A4 —para transporte de carga— aunque por ley debió abstenerse y evitar posibles conflictos de interés.

“El 22 de septiembre de 2022 obtuvo la licencia de conducir clase A2, A4 y C, verificándose que el contribuyente rindió los exámenes teóricos el mismo día, para las 3 clases y en 1 hora, y que el referido funcionario y padre del solicitante, en la misma jornada, tomó el examen práctico a dicho contribuyente, resultando aprobado en esa misma instancia”, dicta el informe.

Reprobados con licencia
La investigación contra la Dirección de Tránsito de Coronel partió el 1 de enero de 2020 y se extendió hasta diciembre de 2022. Fue una denuncia la que alertó que se estaban entregando licencias de conducir irregulares. Y también, que la administración estaba lejos de un óptimo funcionamiento.

Esa fue la punta del iceberg para todo lo que vino después. Si bien realizaron un sumario interno que destapó anomalías, más tarde aparecieron nuevos casos que demostraron, a juicio de Contraloría, que el fraude nunca se detuvo.

“La Municipalidad de Coronel otorgó licencias de conducir a postulantes con exámenes teóricos reprobados o bien en forma irregular y al margen de lo establecido en la ley”, estipula el documento.

El detalle de esas faltas son, por ejemplo, presentar certificados de enseñanza básica falsos. En Coronel al menos tres solicitantes incumplieron esta obligación y aún así se les otorgó la licencia A2, que es para vehículos de transporte de pasajeros. En concreto, los hombres sí entregaron papeles que supuestamente acreditaban la educación mínima requerida por ley, no obstante, no existe registro en el Ministerio de Educación y las fechas no coinciden.

Más grave aún. También se detectaron casos donde la rúbrica del director de Tránsito fue falsificada. Esto se replicó en los exámenes médicos de otros postulantes, donde la firma del médico era falsa.

“Juan, el 10 de febrero de 2018, obtuvo la licencia de conducir profesional A2 y A4, de cuyos antecedentes en su carpeta se advierte que el 3 de diciembre de 2015 y el 1 de junio de 2017, habría aprobado los exámenes teóricos para las clases A2 y A4, respectivamente. Sin embargo, de la información obtenida del módulo de licencias del sistema, consta que el contribuyente rindió dichos exámenes el 21 de diciembre de 2017, y que ambos fueron reprobados“, es uno de los ejemplos que plasma Contraloría.

La reprobación de los exámenes teóricos fue una de las prácticas más comunes. En otros casos, simplemente nunca lo rindieron. Para cualquiera de las dos situaciones, salieron con la licencia de conducir en su mano.

“Evelyn, el 7 de febrero de 2018, obtuvo su primera licencia clase B, advirtiéndose en su carpeta que habría aprobado la evaluación teórica el 29 de noviembre de 2012. No obstante, verificado el módulo de licencias, consta que la postulante no rindió el examen teórico para obtener la licencia clase B. Posteriormente, se comprobó que obtuvo la licencia profesional A2”.

Funcionarios que se teletransportan
Un artículo previo de BBCL Investiga expuso el caso de Sara Donoso Mendoza, una funcionaria de la Dirección de Tránsito que vendía licencias hasta con promociones al por mayor. Este informe también la señala como principal responsable.

La mujer inició en 2017 como administrativa. Dos años después figuraba como titular y con contrato en la Dirección de Desarrollo Comunitario del municipio. En febrero de 2022 volvió a ascender al grado 15.

Lo irónico es que Donoso presentó 22 licencias médicas consecutivas desde el 6 de septiembre de 2021 hasta el 14 de marzo de 2023. Es decir, se mantuvo fuera por 536 días. Si bien el Compin le rechazó 19 certificados, el municipio de Coronel nunca le descontó sus remuneraciones.

Pese a lo anterior, Contraloría informó que entre marzo y abril de 2022 habría vendido —al menos a 18 personas— licencias de conducir. Su desfachatez llegó a tanto que incluso ocupó su propio rut para rendir las pruebas teóricas.

Otra funcionaria involucrada es Carmen, la médico del gabinete psicotécnico. La mujer fue contratada en 1995 para una jornada de 11 horas semanales. En 2012 le aumentaron el sueldo a $1,1 millones de pesos con el requisito de cumplir 22 horas. Si bien ese año formalizaron su contrato, desde 2010 ya recibía ese monto.

Contrario a lo que dictaba el papel. Carmen iniciaba su jornada a las 8:30 horas y terminaba a las 11:00. Atendía a 35 personas de lunes a jueves. Un total de 10 horas a la semana.

Adicionalmente, Carmen tenía otro trabajo. El primero era como médico del gabinete psicotécnico y, el segundo, en el Centro de Salud Familiar (Cesfam) de Lorenzo Arenas. El arte del desdoblarse era poco para ella porque en ambos lugares firmaba a la misma hora o con minutos de diferencia.

“Verificados los registros de asistencia de doña Carmen en la Municipalidad de Concepción, registrados a través de marcaciones en el reloj biométrico, se constató una incompatibilidad horaria de 572 horas y 25 minutos, sin considerar en dicho cómputo, el tiempo de traslado que debió emplear para movilizarse desde la dirección de tránsito de Coronel”, dicta el documento.

Más tarde se negó a usar el sistema de marcaje. Su estrategia era firmar manualmente el libro. Según ella, su jornada estaba limitada a la cantidad de pacientes atendidos. No a un horario. Lo que nunca dejó de aumentar fue su sueldo, que en 2022 ya iba en $2,5 millones con asignaciones municipales que no debían pagarle por trabajar tan pocas horas.

Papeles en el suelo
Hasta marzo de 2023 la Dirección de Tránsito tenía 50 mil carpetas de postulantes distribuidas en tres bodegas. Una ubicada en el mismo departamento. Las otras dos en espacios arrendados que tienen como representante legal al dueño de la Escuela de Conductores Profesionales Colonos del Sur Limitada, por las que pagan $250 mil pesos.

Además del potencial conflicto de interés que dejó entrever el informe, se constató que parte de las carpetas están apiladas en el suelo y mal rotuladas. Por ejemplo los ruts están mal digitados.

“La falta de control de los documentos foliados podría permitir el acceso indebido a ellos y emitirse esos permisos de forma fraudulenta”, determina el informe.

Según el municipio de Coronel, la inconsistencia en los registros se debe a que el traspaso de la información se hace de forma manual. La entidad se comprometió a pedirle a informática que gestione un software que traspase los formularios automáticamente. Pero hasta la fecha no se materializa.

Si bien los directores de Tránsito y de Transporte Público —Luis Coloma y Raúl Fuentes respectivamente— fueron sumariados administrativamente en 2020, la Municipalidad de Coronel no registró la multa en el sistema público. Misma situación ocurrió con Sara Donoso.

El director jurídico de la Municipalidad de Coronel, Jorge Irribarra Castillo, aseguró a BBCL Investiga que denunciaron a fiscalía los hechos.

—Con anterioridad al requerimiento de Contraloría, el municipio ya había hecho la denuncia en su oportunidad, toda vez que se estaba llevando a cabo un sumario. Dentro de ese sumario, el fiscal que lo estaba sustanciando tomó la decisión de hacer esta denuncia en la fiscalía para que se investigaran estos hechos que evidentemente son constitutivos de delitos— aclaró.

Respecto a Sara Donoso, informaron que ya no trabaja en el municipio y está siendo investigada por el Ministerio Público.

Ahora la Contraloría dio un plazo de 60 y 90 días hábiles para que el municipio de Coronel de cuenta de lo expuesto en el Sistema de Seguimiento y Apoyo de la entidad. Junto con eso, también remitieron todos los documentos al Ministerio Público.

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